Para poder lucir unas uñas bonitas, ya sean cortas y naturales como pintadas con elaborados nails-art, es imprescindible, como en todas las cosas de esta vida, tener una buena base.
Ya puedes pasarte horas de pulso y paciencia haciéndote mil virguerías en las uñas, que si no están limpias de pielecitas y bien limadas, todo tu esfuerzo sólo servirá para que se noten aún más todas esas imperfecciones.
Así que empecemos por el principio:
Proceso:
- Limar o cortar las uñas (o ambas cosas si pasas de largas a cortas). Si las llevas pintadas debes quitar previamente el esmalte con quitaesmalte.
- Poner las uñas en remojo con agua jabonosa para ablandar las cutículas.
- Si quieres aplica una crema para cutículas y si no directamente pasa a poner crema en las manos.
- Desengancha y retira las pielecitas adheridas a la uña, arrastrándolas hacia la cutícula. Si tienes pocas con ese proceso será suficiente para que salgan y no tendrás que cortar cutículas.
- Si tus cutículas están gruesas y sobresalen debes cortarlas, es signo de que es piel muerta. Si están muy pegadas a la uña, son finas y transparentes, no las toques.
- Aplicar una base protectora (o endurecedora si la necesitas). Una vez seca aplica tu esmalte de uñas elegido en dos capas y por último aplica otra capa de base protectora para que el esmalte dure más tiempo.
Trucos:
- Si tus uñas te parecen muy grandes, no las pintes hasta los extremos. Deja unos milímetros sin pintar por cada lateral para estrecharlas, o en la base de la uña si quieres acortarlas.
Por el contrario, si son pequeñas (como es mi caso) píntalas completamente de extremo a extremo y tocando la cutícula.
- Si te sales de la uña al pintarlas y manchas el contorno puedes retirarlo con un algodoncito empapado en quitaesmalte, pero te recomiendo un truco más rápido que hago yo:
Una vez que las uñas están completamente secas, lávate las manos con agua caliente y jabón, rasca un poquito las manchas bajo el grifo y salen fácilmente.
Una vez que las uñas están completamente secas, lávate las manos con agua caliente y jabón, rasca un poquito las manchas bajo el grifo y salen fácilmente.
¡Hasta la próxima!
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